Según lo que sabemos, tendremos 365
días llenos de oportunidades y también de tropiezos, de logros y de parálisis
de metas. En nuestro nuevo rumbo, donde retomamos o comenzamos un proyecto nos
encontraremos con diversas situaciones, entre positivas y negativas, no podemos
engañarnos. No puedo decirte que todo será color de rosa, o que será muy fácil.
Te estaría mintiendo si también te digo que todo será maravilloso. Tú crees que
yo tengo una fórmula mágica, pues te respondo que no la tengo. Lo que yo sé, es
que si no persistes no alcanzarás lo que deseas, sino te aferras al sueño, éste
se desvanecerá, sino crees en ti realmente la lucha terminará.
¿QUÉ VAS A HACER PARA SOBRELLEVAR ESAS 365 OPORTUNIDADES?
Desear no basta, querer no basta,
tener la idea no basta. Cuando tú has trabajado tanto y miras tu trayecto
durante un momento conjuntamente con lo que has hecho, sí, ves que tienes poco,
te desanimas, te produce duda, temor y hasta debilidad espiritual.
Muchas veces te vas a sentir agotado,
como si el tiempo es escaso para ti, por causa de las actividades que vas a
desarrollar, aún con estas sensaciones en tu cuerpo, una máxima de un líder es
alimentarse correctamente y tener tiempo para descansar, esto es fundamental
para la prolongación, persistencia y solidez de tu vida en liderazgo. Y por
supuesto, de cualquier proyecto profesional, negocio o actividad que emprendas.
Estas dos actividades como comer bien
y descansar lo necesario, a simple vista parecen no tener nada que ver con el
liderazgo, sin embargo, son de suma importancia para poder lograr los objetivos
que nos proponemos. Además, son los detonantes de pensamientos negativos que
van en aumento y que, en gran escala, son parte de fracasos inimaginables.
Un líder preparado sabe que
periódicamente debe verificar sus actividades realizadas, revisar su
planificación, contemplar los pros y contras, estar alerta para las
oportunidades, la única forma de hacerlo es tomar en cuenta que nuestro cuerpo
y mente necesitarán estar en forma, mantenerse en buen ritmo, estar alimentados
correctamente y darse el descanso necesario para que al retomar actividades se
hagan con entusiasmo, fuerza y ganas, muchas ganas.
Cada día podemos encontrarnos con
obstáculos que veremos de forma negativa en nuestro camino, pero si no tomamos
las debidas precauciones antes explicadas, seguro que creeremos que son
invencibles. Nuestra fortaleza reside en nosotros, toma en cuenta, que hasta en
las guerras se toman períodos de descanso, para adquirir fortaleza y salir de
nuevo a la batalla.
No pierdas de vista lo principal, la
meta que te has propuesto. No te alejes de ella, porque te estarás alejando de
tus sueños. Cada vez que pongas la mirada en tus seres queridos, en esos que te
hacen mover al mundo, estás fijando tus sueños, estás creyendo en ellos, en que
tú tienes el poder de hacerlos realidad.
Puedes mirar los problemas, las
dificultades, los muros de la vida o puedes optar por pasar la tormenta con
todas tus fuerzas, aferrarte a tus creencias positivas, a las palabras que
hacen de ti una mejor persona, a los buenos hábitos que te harán cada día
seguir sin desfallecer, a tus promesas y permanecer enganchado a ellas como la
única alternativa que tienes para sobrevivir.
En los 365 días llenos de
oportunidades, también necesitarás de reposo y consumo de buenos alimentos para
darte energía, recuerda alimentar tu conocimiento, hacer un cambio positivo de
hábitos, hacer relajación, actividades físicas y compartir con la gente que te
hace reír, vibrar, en fin, que te dan emociones positivas también.
Finalmente, recuerda que todo líder
necesita períodos de descanso para seguir en su lucha, que necesita recargar
energía y atravesar todas las etapas de la autopista de la vida, con baches y
sin ellos, porque lo esencial es saber que detrás de todo el esfuerzo
realizado, está el cartel que dice: “Meta”. Ahora reflexiona y hazte la
pregunta: ¿Qué voy hacer con estas 365 oportunidades que tengo en mis manos?
“Acepta
los riesgos, toda la vida no es sino una oportunidad. El hombre que llega más
lejos, es generalmente, el que quiere y se atreve hacerlo.”