El capital humano es uno de los principales
elementos de las empresas. Las medidas de conciliación y de igualdad son
importantes instrumentos que mejoran la motivación de los empleados y el clima
laboral, incrementándose la productividad de la empresa.
El papel de las personas en la organización
empresarial se ha transformado a lo largo del siglo XX. En el inicio se hablaba
de mano de obra, posteriormente se introdujo el concepto de recursos humanos,
que consideraba al individuo como un recurso más a gestionar en la empresa. En
la actualidad se habla de personas, motivación, talento, conocimiento,
creatividad… Se considera que el factor clave de la organización son las
personas ya que en éstas reside el conocimiento y la creatividad.
La motivación es un elemento fundamental para el
éxito empresarial ya que de ella depende en gran medida la consecución de los
objetivos de la empresa. Lo cierto es que todavía muchos sectores no se han
percatado de la importancia de estas cuestiones y siguen practicando una gestión
que no tiene en cuenta el factor humano. En ellos, ha empezado a darse un
déficit de recursos cualificados y es por eso que las empresas están buscando
formas de atraer y retener los recursos humanos.
El mercado de trabajo se ha transformado y en la
actualidad la retribución ha dejado de ser el elemento principal a tener en
cuenta a la hora de seleccionar un puesto dejando paso a otras consideraciones
como la flexibilidad, las medidas de conciliación, el desarrollo personal…
Estos elementos conforman lo que se denomina salario emocional.
La retención del talento y la captación de
recursos humanos son dos de los problemas con lo que se ha de enfrentar la
empresa. España es uno de los países europeos con menos prestaciones para
mejorar la calidad de vida de los trabajadores y éstos son los más frustrados
por su situación laboral. Esta percepción es muy negativa tanto para la empresa
como para los trabajadores. La empresa se resiente porque la productividad baja
y el rendimiento de los trabajadores es menor. Las medidas de conciliación y de
igualdad y la sensibilidad de la empresa hacia la situación personal de los que
trabajan en ella son instrumentos fundamentales para motivar y retener el
talento y mejorar los resultados empresariales. Es importante que estas medidas
se incorporen a una nueva forma de gestionar la empresa más respetuosa con el
entorno y con los grupos de interés.
En la actualidad las principales razones de
permanencia o abandono de la empresa se centran en razones de tipo emocional. Los
y las profesionales cada día valoran más la flexibilidad, la autonomía, los
programas de apoyo, la formación, las medidas de conciliación de la vida
personal y laboral, el buen ambiente laboral... Muchos son los instrumentos que
pueden apoyar a la empresa en su camino hacia la flexibilidad siendo uno de
ellos la incorporación de las nuevas tecnologías utilizadas para una mejor
organización del trabajo y optimización del tiempo.
Un elemento importante a la hora de motivar es
la Comunicación. En numerosas ocasiones la empresa ha incorporado programas de
mejora y ventajas para las personas que trabajan en ella, pero no sabe
transmitirlas adecuadamente y pierden su eficacia ya que no tienen repercusión.
Es importante también por parte de la gerencia el saber transmitir
adecuadamente el proyecto empresarial y hacer sentir a los empleados y
empleadas su implicación en el mismo.
Una advertencia: en esta cuestión de las medidas
para motivar a los trabajadores es fundamental el tener claro que no hay una
guía con medidas adecuadas para todos y todas, hay que tener en cuenta la
situación personal de cada persona con el fin de que nadie indirectamente se
sienta discriminado. Por ejemplo: guarderías de empresa. Las personas que no
tienen hijos/as pueden sentir sus expectativas frustradas en relación con estas
medidas.